La Codosera 2023
Hoy en dia, y gracias a las nuevas tecnologías, se pueden obtener imágenes aéreas si contamos con drones
que nos muestran desde el aire aquello que el ojo humano no ve desde tierra.
Los drones son vehículos aéreos no tripulados capaces de desplazarse por el
aire sin que haya un piloto a bordo, pudiéndose controlar desde tierra con un
mando a distancia capaces de obtener fotografías.
En esta ocasión gracias a ellos, podemos observar que La Codosera es un
pueblo donde predominan las fachadas de las casas de color blanco., una
tradición que viene de antiguo, cuando el ama de casa utilizaba para
blanquearlas la cal procedente de la mina de la finca La Calera.
En el año 1960, en plena desbandada de
vecinos del pueblo emigrando, contaba con catorce calles, un llano, dos ejidos y tres
plazas. Hoy, contando con las calles de nueva construcción, pasan del centenar,
mientras que la población ha descendido casi un cuarenta por ciento.
Es un pueblo muy antiguo, como lo
atestiguan las ruinas del castillo , las piedras de la parroquia o los
cimientos de los pilares que aun quedan en pie del puente romano sobre el rio
Gévora.
También fronterizo y como tal, con mucha historia. Historias de
contrabando, de guardias civiles y mochileros. Historias de un pasado
portugués, Historias de molinos y batanes, historias de puentes caídos y
acequias para el riego, historias de buenos hortelanos, de jornaleros,
comerciantes y buena gente. Historias de leyendas, de religiones y de
apariciones.
Cuenta con un paisaje espectacular, pues es la Puerta del sureste de entrada
al Parque Natural Serra de Sao Mamede. Su mayor riqueza son los manantiales de
agua que se encuentran repartidos por sus alrededores, surtiendo de un gran
caudal el cauce de sus cinco ríos, Gévora, Gevorete, Codosero, Abrilongo y Jola.
No habrá otro en toda la provincia con semejante riqueza aun no explotada.
Su calles de trazado irregular algunas, curvadas y empinadas, con su torre
del Reloj hoy dia, posiblemente la que fuera Torre del Minarete testimonio de
sus pasado árabe. No es menos importante la fachada de la iglesia parroquial,
con su fachada y su espadaña reconstruida una vez desparecida la torre de
estilo militar y posiblemente construida por los Caballeros del Temple en el siglo
XII, cuando el rey de Portugal Dom Afonso Henrique les encomendó la administración
de este territorio una vez reconquistados del Islam.
Actualmente, el pueblo puede presumir de tener buenas comunicaciones, al
contar con tres carreteras que se adentran dentro del territorio portugués, por
La Rabaza, La Tojera y el Marco., donde se encuentra el Puente Internacional
Mas Pequeño del Mundo y otras dos que lo comunican con San Vicente de Alcantara
y la otra con Alburquerque.
Son importante sus fiestas y tradiciones. En el aspecto mariano, el
Santuario de Chandavila es un centro de peregrinación con turistas que llegan
desde diferentes puntos de nuestro país unos, y otros cruzando fronteras. Entre sus fiestas,
a destacar la del Aleluya, un festejo semi religioso que data de cuando estas
tierras fueron portuguesas, manteniéndose en auge durante siglos, y llegando
hasta nuestros días.
El rio siempre fue la riqueza que dio de comer a sus habitantes con sus
plantaciones de todo tipo de hortalizas y legumbres. A eso, en la actualidad hay
que sumarle la construcción de sus piscinas naturales Rio Gévora, en auge cada año, fuente de riqueza por los turistas que nos visitan. Como alojamiento, cuenta
con varias Casas Rurales, recibiendo turistas naciones e internaciones durante
los meses de verano.
Para los que no sois del pueblo, si leéis el presente trabajo, La Codosera
bien merece una visita, pues además de sus buenas cualidades, posee otras
muchas que no las hemos relatados para que el visitante las vaya descubriendo. ----------------------------------------
La fotografía es de Carlos Piris.